Las farolas para iluminar y decorar exteriores son un tipo de punto de luz sostenido por soportes, como postes de diferentes alturas (cuando se instalan desde el suelo) o suspensiones y brazos extensibles para instalación en las paredes.
En el caso de las farolas de jardín y terrazas, generalmente, tienen un aspecto menos espartano que otras farolas de exterior, de hecho, suelen tener una estética y un diseño refinado no solo para iluminarlos, también para embellecer estos espacios exteriores.
Desde Va De Compras vamos a profundizar sobre el papel de las farolas para iluminar y decorar exteriores, sus ventajas y mucho más.
Índice de contenidos
¿Por qué instalar farolas para iluminar y decorar exteriores?
La instalación de farolas sirve para ofrecer luz a los jardines o terrazas, con el fin de garantizar la seguridad proporcionada por la iluminación durante la oscuridad de la noche. De hecho, este elemento de iluminación actúa también como pieza decorativa en los espacios exteriores, como en el caso de las linternas y focos LED para exteriores.
En función de la altura y la orientación de la luz, las farolas difundirán la luz en tus zonas favoritas para alumbrar el exterior y el jardín de la casa, a la vez que garantizan la seguridad de las personas y los coches. Incluso, durante las actividades más sencillas que se realicen, como caminar en el jardín, hacer una barbacoa al aire libre o conducir por el camino de entrada.
Las farolas para iluminar y decorar exteriores suelen tener una altura de no más de dos metros y se utilizan en caminos como entradas y caminos, así como también para enriquecer las zonas de estar al aire libre de la casa.
Ventajas de las farolas con luz LED
Una de las características de las farolas para iluminar y decorar exteriores con luz LED, es que puede ofrecer colores de luz cálidos, neutros e incluso fríos dependiendo del ambiente a iluminar. En general, se recomienda usar luz cálida, pero para las farolas de diseño moderno también se aprecia mucho la luz fría.
Las farolas con luz LED además de proporcionar luz en la oscuridad, aportan ciertas ventajas como la durabilidad y el ahorro de energía, que todas las fuentes de iluminación anteriores son capaces de igualar.
Cómo sacarle provecho a este elemento de iluminación
El primer aspecto a considerar cuando planeas instalar farolas para iluminar y decorar exteriores, ya sea en un jardín, un camino de entrada, un porche, un garaje, es pensar cuáles son las áreas con mayor tráfico y que, por tanto, necesitan estar más iluminadas.
Veamos algunos consejos muy útiles para conseguir resultados positivos al momento de querer instalar estos elementos de iluminación:
- Si quieres iluminar el camino de entrada, por ejemplo, puedes elegir si instalar focos laterales o empotrados en el suelo. Las farolas empotradas son idóneas si la ruta es apta para vehículos, por ejemplo, la que conduce al garaje porque crean una especie de camino de luz hasta la caja.
- En el caso que quieras iluminar el jardín para poder aprovecharlo en primavera y verano, puedes optar por focos de suelo o postes y estacas. Estos últimos están disponibles en el mercado diferentes alturas, para que elijas el que más te guste o se adapte a las necesidades de cada zona.
- Los postes altos iluminan un área bastante grande y se recomiendan donde las ramas de los árboles no apantallan la luz, por el contrario, el poder de iluminación de las farolas se reduce considerablemente.
- Por otro lado, los postes bajos tienen un haz más pequeño y son perfectos para árboles altos: al ser más bajos, su iluminación no se verá afectada por la presencia de ramas y hojas. También crean una luz más limitada, preferible si hay otras fuentes de luz en el jardín, para no pasarse.
- La superposición y las áreas que quedan oscuras son otro aspecto que no debe subestimarse. Dos luminarias muy próximas entre sí con un haz de luz amplio pueden dar doble iluminación a una misma zona. Ello, es bueno si se trata de un factor estético deseado, pero si va en detrimento de otras zonas que en cambio permanecen oscuras, entonces es mejor revisar la disposición de las luminarias y redistribuirlas uniformemente.
- Cuando el rayo de luz debe limitarse a un punto preciso, como puertas, portones y ventanas francesas, las farolas preferidas son las que van en la pared o las linternas para colgar del techo. De esta manera, tendrás una luz más intensa justo donde más la necesitas.
En el mercado actual existen farolas de muchas formas y tamaños, LED o incandescentes, para satisfacer todos los gustos y necesidades, incluidas las económicas.
Conclusiones
Usar las farolas para iluminar y decorar exteriores es un factor de practicidad, seguridad y estética. En los últimos años, también ha habido una tendencia creciente de considerar estos elementos de iluminación como verdaderos accesorios de decoración en aras de mejorar las áreas abiertas de la casa.
La utilidad de elegir farolas para el jardín o terrazas frente a otra se manifiesta sobre todo en otoño e invierno. Las horas de oscuridad son mayores y es agradable llegar a casa para encontrar el camino de entrada bien iluminado y una luz cerca de la puerta que nos ayude a encontrar la llave e introducirla fácilmente en la cerradura.
No hay que olvidar, por supuesto, que un área iluminada crea seguridad y puede hacerte sentir más relajado cuando te vas solo a casa o cuando regresan tus hijos. El factor estético, sin embargo, no solo es relevante en primavera y verano, cuando los espacios exteriores se aprovechan al máximo. También en las otras estaciones será muy agradable asomarse a la ventana y ver una zona luminosa, con postes, estacas y focos coordinados con el estilo de la casa y que iluminan, quizás, el mismo macizo de flores que tanto nos gusta.