Para la temporada de invierno es un hábito definir qué tipo de calefacción vamos a utilizar este año. Existen diferentes tipos de estufas de leña unidades sofisticadas que generan calor gracias a la combustión de una materia prima.
Dentro de los tipos de estufas de leña encontramos metálicas, de hierro fundido o de acero. De esta manera entregan la mayor parte del calor a una única habitación. Así, las estufas no cuentan con recubrimiento y dejan a la vista el tubo de evacuación.
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Diferencias entre estufas
En los distintos tipos de estufas de leña, no solo influye la estética, sino la producción de calor y la eficiencia energética. Gracias a un panel se consigue aumentar la temperatura dentro de la cámara de combustión.
Un fuego abierto tiene apenas un rendimiento menor al de una estufa moderna de fuego cerrado, la que permite calentar utilizando menor cantidad de leña, con aporte ecológico generando una combustión más limpia y eficaz.
La mejor leña, ya sea para barbacoa o para estufa de leña, es la leña seca. La leña húmeda le cuesta prender, hace poca llama y mucho humo.
Tipos de estufas de leña
La leña dura es de mejor calidad, tiene un mayor poder calorífico y una mayor durabilidad. A diferencia de las leñas blandas tienen un menor mando calórico y una duración definida, pero se encienden con mayor rapidez.
No todas las clases de leña son iguales. Unas son más indicadas para hacer barbacoas por brasas que hacen y otras, para dar calor al hogar por el poder calorífico que tienen.
Tipos de leña para estufas
Pero no sólo basta con elegir el tipo de estufa de leña perfecta, la leña que utilicemos es un elemento muy importante, existen varios tipos de maderas que podemos catalogar para nuestras estufas:
- Haya: La madera de haya es muy dura. El poder calorífico que tiene es uno de los más altos aunque su combustión sea rápida se usa como calefacción, para cocinar, ya que sus brasas son muy buenas, y como iluminación, por tener una llama clara y viva.
- Olivo:El olivo, al igual que el olmo, tiene un gran poder calorífico y una gran duración, por lo que su uso como calefacción es muy indicado. Además, sus brasas son excelentes gracias a esta duración, por lo que también es indicado para usar en la cocina.
- Olmo:La leña de olmo se caracteriza por tener un gran poder calorífico y una duración elevada. Esta leña se utiliza tanto para calefacción como para cocinar, ya que las brasas que hace son perfectas para hacer barbacoas. En cambio, su secado es realmente lento.
- Pino:El pino es una clase de leña blanda y resinosa. Tiene un poder calorífico medio y una duración corta. Es muy indicada como iluminación por su llama clara y, además, tiene un secado muy rápido.
- Roble:Esta leña es perfecta como calefacción en estufas de leña y para cocinar, ya que sus brasas son excelentes. Su único inconveniente es que tiene un secado lento
Y hasta aquí nuestro post sobre tipos de estufas de leña, esperemos que te haya sido de utilidad, si por lo contrario quieres pasar un invierno sin frío per las estufas de leña no son tu opción, dale un vistazo a nuestro amplio catálogo de productos de calefacción.
